DEFINICIÓN: DONDE Y CUANDO: Mantener la longitud correcta del césped puede ser una gran ayuda para controlar a la cenicilla polvorienta. French nos explica que “las condiciones ideales para el desarrollo de la cenicilla polvorienta son temperaturas frías en el orden medio de los 60º Fahrenheit, ventilación deficiente, áreas sombreadas y humedad alta. Hay más probabilidades de toparse con la cenicilla polvorienta en pastos de estaciones frías y la primavera, el verano –en ciertas zonas- y el otoño, cuando las temperaturas están en el orden bajo de 40º Fahrenheit, y hasta un orden bajo de 70º Fahrenheit”. El tipo de césped que se tiene también puede ser un factor que influya en la probabilidad de que se produzca un ataque de cenicilla polvorienta. En este sentido, French señala que “aún cuando todas las especies de pasto pueden servir de anfitriones al hongo en referencia, cierta variedades del pasto azul de Kentucky, los ryegrass perennes, el bermudagrass, el zoysigrass y ciertos tipos de fescuas tienen la tendencia de ser más vulnerables a un ataque del hongo cenicilla polvorienta”.
En lugares donde hay demasiada sombra como para que el pasto se de bien, se pueden sembrar plantas cobertoras como las hostas que toleran la sombra. Otras estrategias de control sugeridas por French son: proporcionar buena ventilación mediante la poda de arbustos y árboles, aumentar la luz solar al podar arbustos y árboles, evitar el exceso de fertilización con nitrógeno, y regar a profundidad y sin mucha frecuencia, pero asegurándose de que el pasto no sufra de estrés por sequía. Nuestras prácticas de poda también ayudan con el control de la enfermedad. En este sentido, French nos dice que “un césped que está demasiado corto puede producirle estrés al crecimiento de la planta, mientras que un césped muy alto puede servir de nicho adecuado para la humedad y falta de ventilación. El hongo crece con fuerza bajo condiciones de alta temperatura, rocío (y) condensación porque eso promueve el crecimiento de los hongos y la germinación de las esporas”. French añade que cuando se corta el césped, sólo se debe cortar un tercio de la longitud de la hoja, porque el corte brusco de ésta puede estresar a la planta, haciéndola también más susceptible a otras enfermedades, y que la altura del pasto depende de las especies específicas que se tengan. Los productos químicos también pueden utilizarse para controlar la enfermedad, aunque por lo general, de acuerdo con French, éstos no son necesarios. Si decide utilizar fungicidas, busque productos que contienen propiconazole, myclobutanil, triadimefon, fenamirol o manozeb. Si busca un fungicida etiquetado como orgánico, hay productos que contienen bicarbonato de potasio. French advierte que “hay que cumplir con las instrucciones de uso indicadas en la etiqueta, independiente de cuando se utilicen productos químicos, y asegurarse de que el producto está etiquetado para pasto”. El autor es editor asociado de Lawn & Landscape. Su correo electrónico es bhorn@gie.net. |
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